Un pasaje del antiguo testamento que siempre me ha fascinado porque refleja muy bien la amistad, el cariño, la fidelidad, la fe y el compromiso. Ya sabéis, ese momento en el que Noemí se despide de sus nueras, Orfá y Ruth que han quedado libres del matrimonio por la muerte de sus maridos, hijos de Noemí. Las tres viudas y sin futuro. Noemí aconseja abandonarla en Moab y comenzar de nuevo sus vidas en la próspera Judá. Orfá sí lo hará, pero Ruth permanecerá a su lado. Ella expresará esta decisión con ese credo de mujer valiente, objeto de mi predilección: "No me pidas que te deje, ni me ruegues que te abandone. Donde tu vayas, yo iré, donde tú vivas yo viviré. Tu pueblo sera el mío también, tu Dios es mi Dios.... nada podfrá separarnos, ¡nada!, ni siquiera muerte" (Rt 1,16-17) Así son la amistad, el amor y la fe verdaderas: definitivas, sinceras, eficaces.
Hace unos días llegó de nuevo, por segunda vez, Pepe para en esta ocasión moverse un poco más por este intrincado pais con el fin de mejorar las instalaciones de alguna misión más. M'baïki, Mongoumba, Boda, Grimarí y Kaga-Bandoro se verán bendecidas por su buen trabajo y dedicación. Estos meses en España, lo sé porque lo conozco bien, ha estado pertrechando sus maletas que ha traído repletas de piezas, componentes y herramientas. Lo que no ha podido traer en su equipaje de avión de 46 kgs, lo ha facturado por DHL y llegará en los próximos días. Así es él, generoso por demás. Al punto que estoy convencido ha ido regando su huertecillo de relaciones humanas, de este espíritu misionero al punto de hacer brotar en alguna de sus amistades el fruto de la solidaridad, como ha sido el caso de la bomba de agua solar que se ha traído gracias al compromiso sembrado en la persona de Félix y la empresa de material eléctrico SINTENEF que regenta en Salamanca. Ser misionero es esto. No necesariamente venir, pero sí contagiar y transmitir bondad alrededor, hacer posible que los buenos sentimientos que albergan en no pocos corazones puedan verse realizados en compromisos con los más desfavorecidos. Misionero es quien riega a su alrededor la tierra con la buena noticia de Jesús, no con palabrerías, si no con pequeños gestos nacidos de una profunda y sincera experiencia de encuentro con Él. Lo que un día vivimos en la parroquia, lo que otro día compartimos en Angola, ahora revierte en buenos frutos del corazón, en signos de vida, en definitiva luz en medio de tanta oscuridad. (nunca mejor dicho!) Estos son los pequeños pasos, imperceptibles y que nunca serán noticia, pero que hacen de nuestro día a día un entorno más acorde con el sueño de Dios en su creación. Padre de dos jóvenes con entraña scout, él construye así un mundo mejor, actitud que ha sembrado en Guillermo y José Manuel, antes incluso de colocarse ellos un día sus pañoletas al cuello.
Angola los trajo a los cuatro y ahora en esta segunda ocasión los ha traído a república Centroafricana a los dos, a Pepe y a su mujer, Fina. Dispuesta a no dejar que la jubilación contagie sus cualidades y capacidades profesionales como enfermera, le acompaña también en esta ocasión. La pena es que la situación particular del momento que vivimos aquí, un tanto convulso e incierto, ha hecho recomendable que no se quede a prestar servicio donde habíamos previsto, el dispensario de Bimbo. Así que retornará en unos días habiendo acariciado el rostro de este país pobre y enfermo, como un día lo hiciera el poverello d'Assisi en aquel rostro de "dama pobreza". Seguirá siendo misionera no aquí, si no con su impagable testimonio de ayuda voluntaria y acompañamiento sanitario y creyente en paliativos. Así se es misionero sobre todo, como también desde un claustro en Sancti Spiritus de Toro, o en la oración y recuerdo diario de tantos que seguís esta experiencia en tantas personas, familia y familias, asociaciones, Delegación de Misiones y tantos amigos que de cuando en vez hacéis que vuestra oración y recuerdo se tornen compromiso concreto ante tanta necesidad.
Y todo este relato hermoso y lleno de bondad, se realiza en el contexto de un país agitado ahora por las próximas elecciones de Diciembre. Habrá sólo un candidato oficial y parece que falta mucho, pero calientan motores ahora por si alguien aún duda a quien ha de votar. Las detenciones se suceden cada día, como avancé en otra entrada. Antiguos altos cargos y familiares al toque de "corrupción" (de la que aquí no se libra nadie). Antes de ayer en el camino entre Berengo y Pissa había un despliegue de fuerzas militares como nunca había visto antes, formada por todos, policia, gendarmería, rusos, fuerzas armadas,... Me pararon y pidieron amablemente que llevara a algunos soldados en la pick-up hasta el siguiente puesto. Una vez dejados , he de deciros que se respira mejor. Ayer tocó el turno aquí al ladito, donde detuvieron a los hermanos del antiguo primer ministro acusados de hacer complot para asesinar al presidente.... ya sabéis aquí como son las acusaciones de fundadas.... En verdad parece que estaban preparando una candidatura alternativa a la opción única que aquí se viste de democracia. Así son las cosas. Me revuelve el interior cada vez que paso por ese gran cartel que junto a una enorme y cuidada foto reza a su pie "Soberano"...
No sabemos qué es mejor si Moab o Judá, el futuro de Rut o el que fuera de Orfá, quizá incluso eso fuera lo de menos, lo importante son siempre las decisiones que uno toma y lo que uno teje en derredor. Así que a todos vosotros, todos, va dedicada esta entrada donde aquí en medio de la crudeza e incertidumbre diaria del contexto, gracias a la aportación espiritual y material de todos y cada uno, hay signos, destellos de una verdadera alternativa para nuestros corazones anclados en el sistema de bienestar pero que conjugamos con la vida que hacemos posible en nuestros entornos en clave del bienser. Ah! por cierto a pesar de estar aún en la estación seca, estamos teniendo algún que otro episodio de lluvia. Se barrunta ya el final del calor para hacer la inmersión en la época de lluvias, pero eso llegará, como todo, un poco más tarde. Espero que esta entrada nos refresque también a todos.
Muchas gracias, Jesús, por tan sincera dedicatoria a todos los que desde el anonimato, seguimos tus pasos por esas tierras. Un abrazo.
ResponderEliminar